
Han pasado 100 días desde el mortal ataque que militantes de Hamás llevaron a cabo en Israel el 7 de octubre de 2023, donde murieron unas 1.200 personas y 240 fueron tomadas como rehenes, 130 continúan secuestradas o muertas. Tras esa incursión, Israel comenzó una contraofensiva en Gaza que ha dejado casi 24 mil muertos, entre ellos miles de mujeres y niños. La mayor parte de la población de Gaza (2,2 millones de personas) ha sido desplazada y la ONU advierte que la mitad de la población corre riesgo de morir de hambre.
«La muerte masiva, la destrucción, el desplazamiento, el hambre, las pérdidas y el dolor de los últimos 100 días están manchando nuestra humanidad compartida», dijo en un comunicado Philippe Lazzarini, comisionado general de la agencia de la ONU responsable de los refugiados palestinos UNRWA.
Israel está bajo una creciente presión internacional para que considere un alto el fuego o una pausa humanitaria en Gaza. Incluso su aliado más cercano, Estados Unidos, que defiende consistentemente el derecho de Israel a la autodefensa, le ha dicho repetidamente a Israel que el número de muertos civiles es «demasiado alto».
Sin embargo, durante el fin de semana, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, marcó los 100 días de guerra en Gaza con un discurso desafiante en el que prometió continuar con los combates “hasta la victoria”.
«Nadie nos detendrá: ni La Haya, ni el eje del mal, ni nadie más», declaró refiriéndose a la Corte Internacional de Justicia donde Israel está siendo acusado por Sudáfrica de cometer genocidio contra los palestinos en Gaza.
«Continuaremos la guerra hasta el final, hasta la victoria total, hasta que logremos todos nuestros objetivos», declaró Netanyahu en una conferencia de prensa televisada el sábado.
Como señaló el primer ministro israelí en su discurso el sábado, los combates no cesarán hasta que Hamás sea “eliminado”.
Así, el futuro de la región y de decenas de miles de civiles que están viviendo en condiciones que han sido descritas de “intolerables” en Gaza, parece sumamente sombrío.